miércoles, 30 de septiembre de 2009

LAS FESTIVIDADES COMO VALVULA DE ESCAPE

A continuación reproducimos artículo aparecido en el Diario de Yucatán de México:

Psicología de la crisis mexicana
La gente se refugia en festividades para afrontar la situación

29/09/2009

El mexicano ya se habituó a las recesiones económicas e incluso se refugia en actividades o festividades para sobrellevarlas, considera Ricardo Trujillo Correa, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Según dice, el fútbol, las fiestas patrias, los viajes y las reuniones con amigos y familiares son las formas en que el mexicano afronta las situaciones de crisis económicas como medios de ignorar escenarios críticos.

De acuerdo con un comunicado de la UNAM, el mexicano actual pertenece a la llamada “generación de la crisis”: lleva treinta años experimentando condiciones adversas, así que ya está acostumbrado a las dificultades y a dar por hecho que todo lo que le rodea está mal.

“Se siente inconforme con su entorno y está consciente de los altos cobros en productos y servicios, pero aun así no pierde su ánimo festivo”, señala Trujillo, académico de la Facultad de Psicología de la casa de estudios.

En respuesta a una psicología inmediatista, el mexicano se asusta y modifica su conducta ante declaraciones alarmistas o al saber que su empleo o patrimonio están en riesgo; sin embargo, a diferencia de lo que pasa en otras partes del mundo, el mexicano no actúa con temor o, si lo hace, es de forma irracional. Un ejemplo frecuente de esto, que raya en el folclor, se da cuando un padre se va de viaje con toda su familia a Acapulco, sin un peso en la bolsa y consciente de que a su regreso “ya veré cómo hacerle”. Para un estadounidense, que en las mismas circunstancias optaría por encerrarse en casa para gastar lo menos posible, aquel comportamiento resultaría temerario.

Por esta razón, la llamada “teoría del shock financiero”, que promueve escenarios graves para generar miedo social e imponer medidas gubernamentales drásticas, funciona de manera muy diferente con un anglosajón que con un mexicano, porque este último tiende a compensar situaciones catastrofistas y reales con indolencia, explica el investigador a “El Universal”.

Indica que los partidos de fútbol sirven de válvula de escape a muchos malestares, al igual que las fiestas. Sólo así se explica que algunas personas “echen la casa por la ventana” para celebrar, aunque esto los ponga al borde de la precariedad...

“Es un ánimo festivo que pretende compensar lo crítico”, comenta Trujillo, secretario técnico de la Coordinación de Psicología Social de la UNAM. Otro episodio que evidencia cómo es la comunidad mexicana se manifestó en la emergencia sanitaria: la gente se asustó al principio ante la posibilidad de enfermarse, pero volvió a la normalidad y adoptó una postura anticrisis que rayaba en lo irracional.

link: http://www.yucatan.com.mx/noticia.asp?cx=17$1310030000$4163327&f=20090929

martes, 29 de septiembre de 2009

TRIPTICO TRAUMA

Los amigos de http://psi-emergencia.blogspot.com/ publicaron este link muy útil dirigido a personas víctimas de desastres: http://www.mediafire.com/?bymzdmx0yyj, buen aporte porque a partir de este modelo se puede trabajar en versiones locales...

ESTAMOS PREPARADOS PARA UNA CATASTROFE NATURAL?




ESTAMOS PREPARADOS PARA UNA CATASTROFE NATURAL?

En este breve ensayo me quiero referir específicamente a estar preparados desde la perespectiva de la psicología de la emergencia, como psicólogos y profesionales afines. Hoy las noticias hablan de un fuerte terremoto en islas del asia pacífico, tsunami incluido. Chile es un pais sísmico, sabemos de terremotos y tsunamis, que han moldeado nuestra (loca?) geografía. Se cuenta que en el terremoto y maremoto del sesenta en Chile, una de las cosas que quedaron en la memoria de los que estuvieron allí fue presenciar como se unieron en una causa común personas muy distintas entre sí, derribando todo tipo de barreras sociales, de status, de profesión u oficio que en otras circunstancias hubiesen afectado la colaboración. Este tesoro dejado por nuestros padres y abuelos, que aún sobrevive en la memoria (y en la web), está aún ahí listo para echar mano de él y producir nuevamente esta confabulación entre todos para afrontar la superioridad de la naturaleza, como ocurrió en ese entonces con el Riñihuazo. Pero los tiempos también han traidos cambios y cabe preguntarse y quizás estamos lejos de alcanzar la vara alta que dejó esa generación que afrontó la tragedia del sesenta. La psicología del siglo 21 tiene bastante que aportar en esta construcción social de la preparación para la eventual catástrofe natural, los psicólogos en este país tenemos un aporte que hacer en esta línea, la invitación está hecha. Saludos.
Fuentes de las Fotos: Wikipedia y http://www.fotolog.com/janocl/28624874